jueves, 18 de junio de 2009

El cerebro humano y el diseñador



Muy buenas...

Hará un par de días que me enteré de la existencia de la web del programa "Redes" de Eduardo Punset http://www.redes.tve.es/ y pude visualizar el último episodio emitido de la serie que trataba sobre el cerebro.
Resulta que propone que lejos de ser un instrumento especialmente diseñado para algo en concreto, el cerebro es en realidad un "apaño", por así llamarlo, que hace ciertas funciones para las que no fue originariamente "programado".
En realidad no se puede decir que el cerebro se haya "programado" de alguna forma, esto solo lo podemos hacer los humanos con nuestros ordenadores, sino que en la naturaleza se suele dar el reciclaje o la reutilización de ciertos órganos para funciones que quizás no tienen nada que ver con las funciones que desempeñaba en un principio. Pensemos por ejemplo en nuestro apéndice. Si bien algunas personas afirman que tiene ciertas funciones y que no es inútil del todo, lo cierto es que el apéndice es un vestigio de un sistema digestivo complejo que usaban nuestros ancestros para alojar comunidades bacterianas que ayudasen en la digestión de los vegetales. Es decir, quizás se puede reutilizar el apéndice para que haga algunas otras pequeñas funciones.
En otro programa de la misma serie de Redes se indica que nuestra columna vertebral no es la estructura más adecuada para sostener un organismo en una posición vertical, la columna vertebral es más eficiente como una especie de "puente colgante", y la mejor prueba de ello la encontramos quizás en los enormes dinosaurios saurópodos algunos de ellos capaces de sobrepasar las 80 toneladas de peso.
De este modo llegamos a la conclusión de que la naturaleza "hace lo que puede con lo que tiene" y que lo más eficiente, con el material de que se dispone, es reutilizar ciertas partes del cuerpo para hacer ciertas funciones.

Respecto al cerebro humano, tenemos un órgano que hace funciones muy complejas, como tener una memoria, ejecutar razonamientos, etc. Sin embargo no parece que el sistema de memoria del cerebro humano sea el más indicado para alojar recuerdos. Otro ejemplo que aparece en el programa atañe al lenguaje y a nuestra capacidad de toma de decisiones. El lenguaje puede llegar a ser altamente ineficiente hasta el punto de que muchas veces es necesario ayudarse con gestos corporales para entender correctamente el mensaje que se pretende transmitir. Respecto al tema de la toma de decisiones sucede que en ocasiones tomamos decisiones pero no recordamos porqué nos decantamos por unas opciones en lugar de otras.
Todas estas cosas parecen indicar que realmente el cerebro está ejecutando funciones para las que no ha sido eficientemente preparado.
Como programador me doy cuenta de que un sistema de memoria como el sistema de almacenamiento de los ordenadores es mucho más eficiente. No solo más eficiente sino simplemente más eficaz, ya que si tuvieramos un sistema parecido no se nos olvidarían ciertas cosas por ejemplo dónde he aparcado el coche o dónde he dejado las llaves.
Y aquí es donde entro de lleno en el tema del diseñador. Un diseñador inteligente que se propusiese crear un organismo eficiente recordando cosas no habría creado un sistema como el cerebro, sino más bien, un sistema más parecido al de los ordenadores. Si bien es cierto que uno se puede plantear que si tengo que construir un sistema de memoria partiendo de un sistema creado para otra cosa el tema ya es un poco más complicado, pero le lleva a uno plantearse, que quizás el ser humano no es el fín último de la creación de un ente inteligente superior, ya que si fuese el fín último no daría un rodeo tan grande. Si yo quiero crear algo, llamémoslo A, no construyo primero otra cosa B para intentar readaptarla para que se parezca lo más posible a A, sino que me pongo directamente a crear A. Si como programador pretendo construir una inteligencia artificial que tenga consciencia, no construyo primero una pseudointeligencia primitiva que se centre en buscar alimento para luego modificarla con el mismo material para que tenga conciencia, sino que programo desde cero una inteligencia artificial autoconsciente.
Si existiese un dios o una divinidad cuyo objetivo fuese la creación de un ser humano, no hubiese dado tantos rodeos a lo largo de millones de años hasta que, por una fortuna rocambolesca, apareciese el ser humano. O bien no existe tal entidad, o bien el ser humano no es su fin último.

Ahí queda eso.

Saludillos.


martes, 9 de junio de 2009

Paradojas temporales



Bueno, recientemente he terminado de leer un libro prestado por una compañera del trabajo titulado "La cuarta Dimensión" de Rudy Rucker (Ojo!, hay otros libros por ahí que hablan de la cuarta dimensión que mayormente tratan sobre esoterismo, telepatía, el alma y chorradas varias, asi que, cuidadito con coger el libro equivocado). Este librillo intenta un poco abrir la mente del lector y trata de inculcarle que el mundo puede ser algo más que lo que se ve a simple vista.
En este post pondré una cosa que me ha resultado bastante curiosa y trata sobre las comúnmente conocidas por las películas de ciencia ficción que tratan de los viajes en el tiempo: las paradojas temporales.
Es algo así como qué sucedería si viajo a través del tiempo hacia el pasado y mato a mi abuela (jo que violento!) antes de que siquiera mis padres nazcan. Esta es la paradoja temporal típica pero también hay otras como la de la ciclicidad de la causalidad: yo viajo a través del tiempo hacia el pasado para entregarme a mí mismo los planos para construir una máquina del tiempo. La máquina es la causa de la propia máquina y el viaje en el tiempo es la causa de que existan viajes en el tiempo.
Bueno, el tema es que con el libro me tropecé con otro tipo de paradoja temporal bastante curiosa:
Pongamos por caso que he conseguido crear una pequeña máquina del tiempo que es capaz únicamente de transportarse a sí misma. Imaginemos que a las 11:55 pongo a mi maquinita a la derecha de una mesa grande y la programo para que a las 12:01 se desplace 2 minutos hacia atrás en el tiempo y a la izquierda de la mesa. Es de esperar que si el viaje se hace correctamente y la máquina se desplaza 2 minutos a través del tiempo hacia el pasado, a las 11:59 aparecerá mi maquinita en el extremo izquierdo de la mesa. Efectivamente, llegan las 11:59 y ¡Flush! aparece una máquina del tiempo igualita que la mía en el extremo izquierdo de la mesa. En el intervalo de tiempo que va desde las 11:59 y las 12:01 puedo ver y tocar las dos máquinas del tiempo. Sería un buen experimento ver qué pasaría si las dos máquinas del tiempo entran en contacto entre sí... ¿se aniquilarían?, ¿o pueden los átomos interferir consigo mismos igual que con otras partículas?, al fin y al cabo solo son fuerzas ¿no?. Pero a las 12:01 ¡Flush! desaparece la máquina del tiempo de la derecha de la mesa tal y como estaba programado.
Hasta aquí no hay ninguna paradoja y todo es normal, no hay dos máquinas del tiempo, simplemente mi máquina ha viajado al pasado para encontrarse con su "yo" pasado.
Al día siguiente me propongo hacer una versión algo distinta del experimento. Coloco a mi máquina del tiempo un sensor o un radar que indique los objetos que hay sobre la mesa. Si la máquina detecta que hay alguna otra cosa que no sea ella misma aborta el salto no vaya a ser que en el salto la máquina se materialice dentro de otra cosa destrozándola (imagínate si antes del lanzamiento coloco un cenicero a la izquierda de la mesa y la máquina se materializa en el mismo sitio). Bien, con las 11:55 y programo a la máquina para que se desplace 2 minutos hacia el pasado a la izquierda de la mesa, pero en esta ocasión lleva el susodicho sensor que aborta el lanzamiento en caso de que haya algo más en la mesa. ¿Que sucedería a las 11:59?, ¿aparece o no aparece la máquina del tiempo?.
Si la máquina hace el salto, a las 11:59 aparece una máquina idéntica en el lado izquierdo de la mesa y durante los 2 minutos que van hasta las 12:01 permanece al lado de la máquina de la derecha, pero si esto sucede, a las 12:01 la máquina de la derecha detecta que hay más objetos en la mesa y aborta el salto, pero si la máquina aborta el salto no hay nada que viaje hasta las 11:59 y por lo tanto la mesa está libre de objetos hasta las 12:01, por lo que la máquina no detectaría nada y realizaría el salto, pero si hace el salto entonces la máquina detecta otro objeto a las 12:01 y aborta el salto, pero si aborta el salto.... blablabla. Si hace el salto entonces no hace el salto, pero si no hace el salto entonces ¡hace el salto!, ¿qué clase de juego demoníaco es este?, ¿salta o no salta? o más bien ¿salta y no salta al mismo tiempo?, ¿¿¿¿Comorrrll????